PULSO
Eduardo Meraz
En aras de justificar la elevada ineptitud de la actual administración a la hora de atender desastres, Morena recurre al ritmo pegajoso de la «cumbia carroñera» como si fuera mantra salvador para ellos y castigo casi divino para opositores.
El presidente totalmente palaciego así lo ha expresado decenas de veces, en la sección «tiempo de zopilotes» de su teatro en atril mañanero.
Como es natural, una vez lanzada la condena a los otros, el dirigente del partido en el poder y la «bastonera», Mario Delgado y Claudia Sheinbaum, repiten el mensaje, el cual es replicado por sus huestes ad nauseam.
«Bailala, bailala Morena, bailala, bailala». Y tienen tan poca gracia para el dancing y asumir responsabilidades.
Según el oficialismo y los cuatroteístas todo lo que emana de Palacio Nacional es verdad irrebatible, es la palabra del señor presidente. Y todo lo hecho o dicho por quienes difieren de sus puntos de vista es mentira y falsedad.
Sin embargo, la realidad se ha encargado de demostrar que los papeles están invertidos. El cuarto de millón de crímenes violentos al término del sexenio, con el triple de elementos en la guardia nacional, dice que algo anda mal.
Los cerca de 800 mil fallecidos por la actuación cuatroteísta a la hora de atender la pandemia ha servido de antecedente para que hoy la sociedad no quiera dejar en manos del gobierno el rescate y reconstrucción de Acapulco y sus alrededores.
Pero como este tipo de participación social no genera votos y, en cambio, despierta conciencias, el mandatario sin nombre y sin palabra no sólo condena la iniciativa de la gente, sino pretende obstaculizarla o apropiarse de ella, en busca de los votos perdidos.
De ahí la envidia y el temor públicos por las manifestaciones de independencia y autonomía de amplios sectores de la población. Dos décadas de engaños y mentiras se pueden ir al caño, al demostrarse la inutilidad de oficinas de gobierno anhelantes de suplir a la sociedad.
Y aunque la «cumbia carroñera» es pegajosa y la bailan en segmentos populares, de tanto repetirla, ya asqueó al respetable.
He dicho.
EFECTO DOMINÓ
“La propuesta que se hace desde el Poder Ejecutivo al Poder Judicial representa una alternativa real que nos permitirá actuar como Estado, en defensa de su población. Trabajaremos en conjunto por la recuperación de las personas más afectadas, para devolverle el derecho al futuro”. Sentenció la presidenta de la Corte, Norma Piña.
La semana pasada atascado, este martes desfondado. Le falta un strike.
@Edumermo